Capítulo 16 :   Los empeños de Carlos II de Navarra

13 Castilla firme aliada de Francia

Las cosas han salido bien para el rey de Francia. La idea de eliminar un rey castellano aliado de los ingleses como Pedro I y sustituirlo por otro aliado de Francia como Enrique de Trastamara, había sido sugerida a Charles V de Francia por el rey de Aragón Pedro IV el Ceremonioso.

El rey de Francia sabe que tiene un firme aliado en Castilla que le debe el trono y puede ahora contar con la flota de Castilla para atacar a Inglaterra y quebrar su hegemonía marítima. El 23 de junio de 1372 la flota castellana derrota a la inglesa cerca de La Rochelle, lo que permite al rey de Francia tomar territorios y plazas en Poitou, Saintoghe y Angoumois. Y quiere además involucrar a Navarra en esta guerra que prepara para arrebatar a Carlos II los feudos que le aún le quedaban en Normandía. Charles V creyó que ese era el momento para zanjar definitivamente el conflicto con los ingleses y con los navarros que duraba ya muchos años. Lo que no se conseguiría con los ingleses hasta el año 1453.

Carlos II emprende entonces un viaje de exploración diplomática que durará unos dos años. Se dirige en primer lugar a su villa de Cherburgo en Normandía y luego a Inglaterra (1370) para conocer las intenciones del rey Edward III. La reina Jeanne queda en Navarra encargada del gobierno del Reyno con los consejeros Bernardo de Folcaut, obispo de Pamplona y Juan Cruzat, deán de Tudela. Cuando Carlos II vuelve a Francia el rey Charles V quiere atraerlo hacia él para romper definitivamente su alianza con los ingleses y le envía Duguesclin para tratar de acordar una entrevista. Se reunieron ambos reyes en Vernon en donde se ratificaron amistosamente algunos acuerdos anteriores sin mayor transcendencia.

El rey de Navarra había renunciado en 1366 a sus derechos sobre los condados de Brie y de Champagne (33), al ducado de Borgoña, las plazas de Mantes, Meulan en Normandía y al condado de Longueville, habiéndose dado este condado precisamente al temible Duguesclin. A cambio, se confirmó al rey de Navarra sus otras plazas de Normandía y el señorío de Montpellier con sus dependencias y más tarde el condado de Secenon. El rey francés solicitó entonces que Carlos II enviara a su Corte a sus hijos los infantes Carlos Pedro para que, a modo de rehenes, garantizaran el cumplimiento de los acuerdos por parte de Carlos II. Serían finalmente la infanta María y su hermano Pedro los que vendrían a la corte de Francia.